Terrine de Poulet au Vin con aceite esencial

Terrine de Poulet au Vin




Una amiga de mi madre hacía esta deliciosa terrina.  No hay palabras para describir lo sabrosa que resulta. Mi madre me dijo que se hacía con una botella de vino blanco semidulce y un pollo, pero no me dijo qué otros ingredientes debería utilizar. Así que ideé esta fórmula.

Ingredientes:
1 pollo de 2 kilos, a ser posible criado con maíz
6 higaditos de pollo bien limpios de fibras.
1 cebolla grande cortada en juliana
8 tiras de beicon, cortadas en cuadritos y doradas.
6 cucharadas soperas de mantequilla
1 cucharada sopera de mostaza antigua. La que tiene semillas de mostaza
Tomillo 
Romero
1 hoja de laurel
1 botella de vino blanco semidulce corriente
1 ramita de apio
Perejil picado
Pimienta verde
1 tarrina de queso fresco para untar, tipo Philadelphia
2 rebanadas de pan cortado en dados
2 láminas de gelatina disueltas en 200 ml de agua caliente.


Utensilios necesarios

Una olla de cocción lenta, o en su defecto una olla que se pondrá a fuego muy lento.
Thermomix, o batidora
2 terrinas medianas, o una grande


Elaboración:

En una sartén dora la cebolla en 3 cucharadas soperas de mantequilla.  Añade los higaditos junto con el beicon cortado y sigue dorando.

Mete el pollo entero en la olla junto con el vino blanco y las otras 3 cucharadas soperas de mantequilla la hoja de laurel, la ramita de apio, el perejil picado y la pimienta verde.
Añade el sofrito con los higaditos y la cebolla a la olla, dejándolo cocer lentamente hasta que la carne se desprenda de los huesos sólo con rozarlo con la cuchara.

Al llegar a este punto apaga el fuego y deja enfriar todo hasta que puedas sacar todos los huesos del pollo sin chamuscarte los dedos.

Una vez deshuesado el pollo, (asegúrate de que no quede nada de huesos o cartílago) añade las 2 rebanadas de pan cortado, el queso fresco, la mostaza, tomillo y romero  y la gelatina previamente disuelta. (Aquí podrías añadir trufa , si te gusta)

Tritura todo en la Thermomix, o batidora, hasta hacer un puré.

Engrasa con mantequilla los moldes y añade el puré.

Ponlo en el frigorífico hasta el día siguiente y sirve la tarrina con un buen pan tradicional y una botella de vino tinto de calidad. 



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